La subida a la Cruz del Castillo por su vertiente N parte de la localidad alavesa de Lagrán, desde donde se inicia una pista de tierra que nos conduce hacia las faldas de la montaña y el comienzo del bosque. Este tramo se puede realizar en vehículo, dejándolo estacionado en un pequeño aparcamiento señalizado que hay al final de la pista.
Enseguida nos adentramos en un hermosísimo bosque, donde predomina el haya, en el que podemos identificar claramente la señales (rojo-amarillo-blanco, inicialmente; después blanco-amarillo) que nos van guiando, en continuo pero moderado ascenso, hasta el Puerto del Toro.
La ruta continua hasta la cumbre de la Cruz del Castillo, adornada con una enorme cruz metálica que corona esta cima, una ubicación con espectaculares vistas de las montañas de la inigualable Sierra de Cantabria.
Desde la cumbre, se contempla la mole de Larrasa.
NOTAS:
Dificultad: moderada. En la última parte es necesario hacer uso de las manos en varias ocasiones, aun tratándose de pasos exentos de dificultad reseñable. Con roca mojada, nieve o hielo, extremar las precauciones.
Tiempo estimado de ida y vuelta: 2-3 horas.
Distancia: 5 km (ida + vuelta).
