"Las montañas no son estadios donde satisfago mi ambición de logros, son las catedrales donde practico mi religión. Desde sus majestuosas cimas veo mi pasado, sueño el futuro y, con una inusual agudeza, experimento el momento presente... En las montañas yo celebro la creación. En cada viaje a ellas, nazco de nuevo." Anatoli Bukréyev.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Travesía por el Macizo Central de los Picos de Europa


Recorrido:

1er día: Puente Poncebos - Riega del Tejo (Canal del Tejo o del Texu) - Bulnes - Canal de Balcosín - Camburero - Horcada Arenera - Refugio de Jou de los Cabrones. 1.837 metros de desnivel.
2º día: Jou de los Cabrones - Cuetos del Trave - Majada de Amuesa - Canal de Amuesa - Llanos del Tormu - Barrio del Castillo de Bulnes - Riega del Tejo - Puente Poncebos. 2.210 metros de desnivel.
Cartografía: Mapa 1:40.000 Parque Nacional de los Picos de Europa (Macizo Central y Oriental). Ed. Alpina.
Dificutad: alta. El recorrido, largo, presenta varias trepadas y destrepadas, así como un desnivel muy considerable.
Más información:
- Refugio de Jou de los Cabrones o de José Ramón Lueje (2.100 metros de altitud): www.joudeloscabrones.com
- Refugio de la Vega de Urriellu o de Juan Delgado Úbeda: www.refugiodeurriellu.com

Mapa de la travesía


Descripción de la travesía:

Esta larga y dura travesía nos permite admirar y adentrarnos en los agrestres parajes del Macizo Central o de los Urrieles, un paisaje indómito dominado por la caliza y las grotescas dimensiones de las montañas. Estamos en el territorio de los desniveles indescriptibles y los abruptos relieves, los juegos de luces y sombras del atardecer y el amanecer, el hábitat del rebeco y la chova; en suma, Picos de Europa en estado puro.

Culminaremos la primera etapa de la travesía en el refugio del Jou de los Cabrones, situado a 2.100 metros de altitud, el refugio de estas características con acceso más complicado de toda la geografía nacional. Este refugio está enclavado en un hoyo (jou) rodeado de bellas y altas cumbres (Cuetos del Trave, Albos, Dobresengos, Picos y Agujas de los Cabrones, La Bermeja, La Párdida, el Neverón de Urriello,...).

Estacionaremos el vehículo en el aparcamiento de "Torbanes", al pie de la boca inferior del funicular de Bulnes, y cruzaremos el puente de Torbanes, para girar a nuestra izquierda y continuar caminando por la carretera paralela al río Cares, aguas arriba.

Pasamos ante dos establecimientos hoteleros y dejamos a la derecha la carretera que sube al cercano pueblo de Camarmeña, donde existe un excelente mirador que da vista al Naranjo de Bulnes. Atravesamos un túnel y una caseta de información del Parque Nacional (abierta sólo en verano) y, acabado el asfalto, parte un camino a nuestra izquierda que se dirige hacia Bulnes. Hay un letrero indicador del recorrido. Si continuásemos de frente, nos encontraríamos a pocos metros con el camino que va hacia la Ruta del Cares.

El sendero atraviesa el puente de la Jaya y se dirige, en continuo ascenso, al aislado y pintoresco pueblo de Bulnes. Desde luego, no seré yo quien aconseje la subida a este pueblo utilizando el funicular, pues sin duda estaría invitando al caminante a perderse la subida por el Canal del Tejo, un hermoso desfiladero por el que, salvando casi 450 metros de desnivel y en menos de 2 horas, accedemos a Bulnes (alt. 650 metros).

Puente Colines, antes de llegar a Bulnes
Ya en Bulnes, atravesamos el pueblo y, por detrás de la casa del Chiflón, tomamos un sendero empinado (PR-PNPE-19) que pronto alcanza la vistosa Cascada de las Mestas, a 0,5 km de la salida del pueblo. Salvada la cascada por su parte izquierda en una pequeña trepada en la que deberemos usar las manos para ascender, nos dirigimos a la entrada del angosto canal del Balcosín, que nos recibe con un paso dotado de un cable anclado a la roca para facilitar el equilibrio.
 
Bulnes, a nuestra espalda, desde el sendero PR-PNPE-19

Sirga previa la entrada del Canal de Balcosín

Canal de Balcosín 
Ascendido el Canal de Balcosín, nos encontramos con lo que parece (pero no es) un pequeño circo glaciar de forma circular, donde conviene descansar un rato para reponer fuerzas, pues nos espera el exigente Canal de Camburero, hacia la derecha.

La dureza de las rampas harán que la progresión se ralentice, pero la salida del Canal de Camburero nos obsequia con un terreno más amable conocido como Majada de Camburero (alt. 1.350 metros), donde podremos apreciar los restos de alguna antigua construcción. Es precisamente en este terreno más llano, donde Pedro Pidal, marqués de Villaviciosa, y Gregorio Pérez Demaría, "el Cainejo", pasaron la noche del 4 de agosto de 1904 antes de afrontar la exitosa escalada al Pico Urriellu, episodio más renombrado del alpinismo español.

Hacia la Vega de Urriellu
El camino gira en dirección este y pronto aparece ante nuestros ojos la pared septentrional del impresionante Pico Urriellu (o Naranjo de Bulnes). La esperada vista del Urriellu nos anticipa el inicio de una incómoda y larga progresión a través de una pedrera resbaladiza (el Jou Lluengu) que nos termina por conducir a las cercanías del refugio de la Vega de Urriellu o de Juan Delgado Úbeda (alt. 1.960 metros).
 
Uriellu asomando

Acampada numerosa en la Vega de Urriellu
En las inmediaciones del refugio de la Vega de Urriellu hay una fuente donde es posible abastecerse del preciado líquido, antes de reiniciar la caminata, enseguida en notable pendiente, hacia la Horcada Arenera, collado desde el que acometeremos la última parte del recorrido, salvo que las fuerzas y el ánimo acompañen y nos envalentonemos para ascender el Torre Cerredo (2.646 metros) antes de rematar la jornada en el refugio de Cabrones (en mi caso, me dirigí directamente al refugio, pues la exigente travesía me había dejado mermado de fuerzas).
 
Hacia la Horcada Arenera
Nos adentramos en la parte más agreste y solitaria desde que comenzamos la ruta. Si hasta ese momento eran (en época estival) muy habituales los montañeros que pululaban por la zona, a partir de la Vega de Urriellu escasean, por lo que será más fácil, como fue en nuestro caso, contemplar algún rebeco por las inmediaciones y deleitarnos con la soledad de estos espacios salvajes.
 
Abandona la idea de ascender el Torre Cerredo (la senda que se dirige a él es la que parte a la izquierda, en la Horcada Arenera), continuamos recto, para avisar pronto la silueta del refugio de los Cabrones, que se alza, insignificante, en medio de un escenario sobrecogedor por su belleza y lo impactante de las alturas que lo circundan.
 
Refugio del Jou de los Cabrones

Entorno del Jou de los Cabrones al atardecer
Tras pernoctar en el refugio, amanecemos en un teatro natural de dimensiones y belleza sobrecogedoras. Llega el momento de continuar la travesía, después de contemplar, una vez más, los tremendos picachos que nos rodean, tratando de grabar en la retina la imagen de este enclave hermoso y colosal.
 
El sendero, señalizado con las habituales marcas amarillas y blancas de todo PR (en este caso, el PR PNPRE-18, que no abandonaremos hasta llegar a Bulnes), nos adentra en un paisaje dominado por numerosos y caóticos "jous" y la omnipresente caliza, que no dejará paso al terreno herboso hasta llegar a las Campas del Trave.

"El Cuevón", a nuestra espalda

Majada de Amuesa
La llegada al Collado de la Cima es la antesala de la impresionante Canal de Amuesa, que gira hacia el oeste para iniciar un descenso acusadísimo que nos conducirá a las inmediaciones de Bulnes, pero que antes sólo nos concederá un descanso en los Llanos del Tormu. 
Canal de Amuesa
Llegamos al barrio del Castillo de Bulnes, "el de arriba", y ya sólo queda descender nuevamente por el Canal del Tejo hasta llegar a Puente Poncebos, lugar de inicio de esta impresionante ruta circular por los Picos de Europa que a buen seguro tendrá como recompensa buena sidra asturiana y "fabes" que nos ayudarán a reponer fuerzas perdidas y comentar los avatares de tan inolvidables jornadas.

El Cainejo (izqda.) y Pedro Pidal, Marqués de Villaviciosa
 
 
Fotografías cortesía de D.G.

2 comentarios:

  1. ¡Bienvenido a la bloggosfera, Nano...! Un saludo desde Zaragoza:

    Alberto Martínez Embid

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  2. Por cierto: una imagen en tu carátula de inicio bien maja del circo de Piedrafita en Sallent, con la Gran Facha y el resto de la peña... ¿Cómo lo diría yo...? Ah, sí: muy "russelliano"... Otro saludo cordial...

    Alberto Martínez Embid

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